Comer Saludablemente...

Algunas personas no conocen el correcto significado de comer saludablemente. Aquellos que tienden a los extremos (vegetarianos, carnívoros, comedores de chatarra, anoréxicos, etc) tienen un enemigo oculto que no siempre pueden identificar. Son ellos mismos.

A continuación listo un conjunto de opiniones involucradas con una alimentación más saludable, los cuales desarrollaré más adelante en otros post.

1. Come variado (distintos tipos de alimentos como: frutas, vegetales, legumbres y carnes). Pero lo más importante, prepara distintos platos que requieran diferentes tipos de alimentos, comer carnes blancas algunos días y carnes rojas algunos otros ayuda al organismo a obtener distintas proteínas y nutrientes. De forma similar pasa con los vegetales, legumbres y frutas. Por ejemplo, las naranjas, si bien es cierto que son fuentes de vitamina C, también es cierto que no es la única vitamina a ser utilizada por el cuerpo (si piensas que tomando un vaso de naranja durante las mañanas te evita toda enfermedad, piensa de nuevo). Preparar distintos platos te va a dar mayor curiosidad a nivel gastronómico, pero también te hará un poco más saludable.
   
   
2. Evita las dietas restrictivas. Algunas dietas obligan a consumir un número o cantidad de alimentos en específico en cada una de las comidas. Algunas de ellas hasta te limitan a unos pocos tipos de alimentos (como solamente arroz, atún, piña, entre otras). Este tipo de dietas generan cambios metabólicos en el cuerpo para preservar las grasas en el mismo, esto quiere decir que, al detener la dieta tu cuerpo va a absorber todas las grasas en los alimentos (o las sintetizará si no las encuentra) y no las quemará dado que le estás indicando periodos largos de hambruna (imagina que somos unos osos preparándose luego de la hibernación).



3. Come solo cuando tengas hambre. Comer al sentirse nervioso (o ansioso) es un habito a eliminar de la conducta personal. Incrementa la absorción de “porquerías” y realmente no te ayuda a resolver el problema de la ansiedad… (menos si estás nerviosa porque no te quede el vestido o porque veas a ir a la playa y quieres impresionar a esa chica con tus abdominales planos).




4. Vence el mito de las calorías, azucares y los carbohidratos. Similar a hacer dietas restrictivas, eliminar las azucares, grasas o harinas de tu dieta no hace nada para bajar unos cuantos kilos. Trata de comer dichos elementos durante la mañana dado que el cuerpo por lo general consume las calorías y los carbohidratos durante la mañana y parte de la tarde. Comerse ese rico helado durante la noche si te dará unas lindas llantitas de más.



5. Come un buen desayuno, un almuerzo balanceado y una cena paupérrima (ojo, pero come algo). Tu cuerpo va a aprovechar mejor todos los alimentos si son consumidos durante tus horas activas. Cuando tu duermes, tu estomago también lo hace, por lo tanto, si comes mucho de noche, se digerirá durante la mañana (durante la noche solamente se fermentará generando una mala digestión).
   
   
6. La comida rápida se llama así porque rápidamente te manda al hospital. Comprobado con varios estudios, la comida rápida contiene muchas grasas tran-saturadas (dicho en cristiano, grasa venenosa o asesinas), esas comidas tan ricas perjudican a tu corazón y no importa la dieta que hagas; las grasas que se fijan al corazón nunca serán removidas de él (a menos claro que optes por un trasplante de órganos).
   

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